Saltar al contenido
De Todo Negro

El color negro en la moda femenina

Desde su invención, la forma en que la moda va cambiando ha estado condicionada a factores sociales, culturales, económicas y morales. Es apenas unas cuantas décadas atrás que también ha estado definida por factores climáticos, no sin dejar de lado también como elementos importantes los colores empleados. 

El color que ha marcado tendencias sin importar el diseñador, la marca o la época, ha sido el negro pues jamás su fascinación le ha sido indiferente a nadie. Antes se pensaba que el blanco era la suma de todos los colores y el negro la ausencia de los mismos dándole el lugar de un tono comodín, versátil y atemporal.

Desde su implementación en el vestuario, el color negro ha tenido connotaciones tradicionalmente asociadas a la dignidad, la humildad, la autoridad, el duelo e incluso la rebeldía. En la Europa del siglo XVI, la Corte española impuso la moda del negro, siendo pronto imitada por la nobleza del resto de Europa. A partir del siglo XIX, los tintes negros en el empleo de la indumentaria, dejaron de ser un privilegio de las clases altas para llegar a todos los niveles sociales y a partir de ese momento, su uso se generalizó, siendo utilizado con mayor fuerza en prendas masculinas. 

También se usó en los uniformes de profesores y empleadas domésticas, pues la ropa negra era más fácil de limpiar y las manchas se notaban menos, por lo cual, también se consideraba el color adecuado para la ropa infantil de diario y solo en ocasiones especiales, a los niños se les vestía de colores más claros.

Durante el siglo XIX, se extendió la costumbre de emplear el color negro para el luto, siendo la única circunstancia que obligaba a las señoras de las clases altas a vestirse de negro, color que por lo general despreciaban porque lo relacionaban con las criadas y la clase obrera.  A las damas de la nobleza, les gustaba ser retratadas con elegantes vestidos de seda y encajes blancos, donde el único toque de color provenía de algún chal o cinta que sirviera de contraste. Pero es hasta el siglo XX que el negro toma relevancia en la moda con las creaciones de Coco Chanel.

TRAJES NEGROS DE DAMAS COCO CHANEL EN COLOR NEGRO

La diseñadora en 1926 lo despojó de su relación con las clases obreras y el luto, para otorgarle una nueva carta de naturaleza a través de su petite robe noir, a partir de entonces, las mujeres que seguían la moda comenzaron a lucir elegantes y estilizados vestidos negros, sobre los cuales destacaban mucho más los complementos y accesorios. De alguna manera, el concepto iniciado en la España del siglo XVI, volvió a renacer y hoy se le conoce al “Little Black Dress” como una pieza necesaria para toda mujer.

“From follows function” es el lema del diseño moderno. Se refiere a que se renuncia a los ornamentos y a todo aquello que sea solo un adorno y cobran mayor importancia la objetividad y la funcionalidad del vestuario. Por esto, en la moda es tan importante al igual que en el diseño, que todo lo que representa el lujo, venga acompañado del negro, pues así no se necesita nada más que lo complemente.

El negro, además de elegancia y sobriedad, resulta un color misterioso pues no transmite ninguna sensación como lo haría cualquier otro, y puede que en ocasiones este significado explícito se asocie a nuestra actitud. Si quitamos los colores a los diseños, dan la sensación de ser más objetivos. 

RSS
Follow by Email